Nací y crecí en Miami. Le di mi vida a Cristo a los 12 años, desde entonces mi vida gira en torno a servirle a Él. Desde muy joven, la música fue mi pasión, siempre estube cantando, nunca quise hacer otra cosa.

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En el momento en que entregué mi vida a Cristo, mi enfoque pasó de simplemente cantar a querer servirle sólo a Él, y descubrí que podía hacerlo a través de la música.

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He estado en este viaje desde que tomé la decisión de conocer a Dios, aprender acerca de Él y Su creación y aprender de qué se trata realmente vivir una vida que lo adora.

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Y he aprendido, que no se trata de música, se trata de vivir una vida agradable a sus ojos.